Cecilia González Michalak
¡Cuidado! Este libro contiene spoilers… y no sólo uno, sino 100. La culpa de este tomo la tiene Lisa Brown, autora e ilustradora del New York Times, y de diversos libros como The Airport Book, How to Be, Goldfish Ghost, Mummy Cat y de su propio libro The Phantom Twin. Un día, decidió conjuntar sus dos pasiones: la lectura y dibujar para hacer el resumen en tres viñetas de grandes obras de la literatura.
Leer es importante para cultivar la vida interior y exterior de una persona. Aunque muchos no han encontrado el placer de descubrir historias en papel (todavía), la lectura se ha vuelto uno de los mejores regalos que ha recibido el hombre desde la invención de la escritura. Es una actividad que tiene muchos beneficios, y como cualquier deporte o capacidad manual, se debe ir tomando poco a poco, para evitar caer en la frustración.
La lectura, aparte de favorecer el aprendizaje y permitir la divulgación del conocimiento, es una herramienta increíble para fomentar la imaginación y despertar la curiosidad, permitiendo hacer nuevas conexiones axiomáticas que retrasan el envejecimiento mental, consiguiendo un cerebro más activo. Además, para la salud mental, es buena para combatir el estrés y ayudar a relajarse, permitiendo una disminución de la tensión muscular.
Consumir palabras permite avivar y acrecentar el mundo interior. Muchas veces leer es una fuente positiva de evasión y entretenimiento. Ayuda también a combatir momentos de soledad, con la magia de sentir que los personajes que estamos descubriendo entre las páginas son allegados nuestros y nos permiten en confianza acompañarlos en sus aventuras y periplos.
Asimismo, leer permite desarrollar habilidades necesarias para relacionarnos con el mundo exterior. Hay libros que narran injusticias, tragedias y dramas; situaciones devastadoras que se vivirán en carne propia palabra tras palabra, permitiéndonos empatizar con un personaje, y posteriormente darnos armas para también empatizar en el mundo real. Y con cada lectura que se monta en nuestra bóveda de la memoria, a ella se suman vocabulario, rapidez mental, y otras habilidades comunicativas que favorezcan el trabajo y la socialización.
Lo importante es leer, y nadie debe ser juzgado por sus libros o géneros favoritos. Como hay gustos, hay millones de libros que esperan ser descubiertos y llegar al corazón de una persona. Por eso Lisa Brown divide sus lecturas en once categorías: Grandes ideas, Épica, Tormentos femeninos, La guerra es infierno, Familias (in)felices, El horror, Criaturas, Amigos y enemigos, Amor, Sexo y Muerte. Y, en cada una de estas secciones, se pueden encontrar libros de todo tipo, desde Moby Dick hasta Twilight, lo que permite al lector conocer un abanico amplio de nuevas opciones y recordar clásicos como libros más contemporáneos. No importa el género, importa el tema que le llame la atención a uno.
El estilo de esta ilustradora y escritora es peculiar porque aplica a sus viñetas una pizca ligera de humor negro, permitiendo a uno disfrutar la idea general de un libro con un twist. Esta simpática mezcla ayuda a la autora a plasmar en viñetas el crudo mensaje de alguna obra que muchas veces pasa desapercibido por los aplausos a su prosa, o, al contrario, ridiculiza las decisiones y actitudes de algunos de sus personajes, que sin todo el regodeo de la historia, se convierten en situaciones muy cómicas.
Si conocen a personas que amen leer, este libro puede ser un gran regalo. Si conocen a personas que quieren empezar a leer, este libro puede ser una gran guía debido a la selección de obras escritas por grandes escritores de la historia como Agatha Christie, Antoine de Saint-Exupéry, Charles Dickens, William Shakespeare, Jane Austen, Herman Melville, Suzanne Collins y Margaret Atwood, entre otros.
