Este lunes, el Parlamento de Israel aprobó dos leyes que prohíben las actividades de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) dentro del país y en áreas bajo su control. Esta decisión llega tras años de tensiones y críticas contra el organismo, que es clave para la distribución de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza.
La resolución, que recibió 92 votos a favor y solo 10 en contra, ha suscitado preocupación entre potencias como Estados Unidos, Reino Unido y Alemania, quienes consideran la medida como un posible obstáculo para la ayuda humanitaria en Gaza. Antes de la votación, el Departamento de Estado de EE. UU. expresó «profunda preocupación» debido al rol crucial que desempeña UNRWA en la región.
Desde Israel, la agencia ha sido acusada de tener vínculos con Hamás, señalando que algunos empleados de UNRWA participaron en el ataque contra Israel en octubre de 2023, una acusación rechazada tajantemente por el organismo. En tanto, Philippe Lazzarini, comisionado general de UNRWA, calificó la decisión como un «precedente peligroso» que violenta la Carta de Naciones Unidas y las obligaciones de Israel conforme al derecho internacional.
A raíz de estas tensiones, Estados Unidos suspendió sus aportaciones a la agencia y solicitó una investigación. No obstante, el gobierno de Joe Biden mantiene su apoyo al papel de UNRWA en Gaza, subrayando su relevancia para brindar asistencia a los refugiados palestinos en la región.
