La empresa tecnológica Nvidia informó que prevé una pérdida de hasta 5,500 millones de dólares en su primer trimestre fiscal, como resultado de nuevas restricciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos a la exportación de sus chips a China. La compañía comunicó a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) que esta medida afecta directamente a sus unidades de procesamiento gráfico (GPU) H20, que hasta ahora eran los únicos chips permitidos para su venta legal en el país asiático.
Las autoridades estadounidenses notificaron a Nvidia que, desde ahora, deberá tramitar licencias especiales para exportar los H20, argumentando preocupaciones sobre su posible uso en supercomputadoras chinas. Esta decisión se suma a una serie de bloqueos previos que ya prohibían el envío de chips más avanzados, destinados principalmente al desarrollo de inteligencia artificial de alto nivel.
La reacción del mercado no se hizo esperar: tras el anuncio, las acciones de Nvidia se desplomaron más de un 6% en las operaciones posteriores al cierre. La compañía también señaló que el nuevo requisito de licencia aplicará indefinidamente y que los costos estimados incluyen inventarios, compromisos de compra y reservas relacionadas con estos productos.
El trimestre fiscal de Nvidia concluye el 27 de abril, y estos cambios representan un duro golpe para su negocio en China, uno de sus principales mercados. Esta nueva barrera comercial se suma al ambiente tenso generado por las políticas arancelarias recientes impulsadas por la administración estadounidense, lo que ha incrementado la volatilidad en el sector tecnológico.