En medio de un juicio por presuntas prácticas monopólicas, Google presentó una serie de propuestas al Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) en relación con su negocio de tecnología publicitaria. El gobierno estadounidense ha solicitado que Google se deshaga de esta división, alegando que la compañía ejerce un monopolio en el sector.
Tras el fallo de una jueza que determinó que Google creó un monopolio en las herramientas publicitarias, la empresa de California manifestó su desacuerdo respecto a su herramienta para editores, Google Ad Manager, y anunció su intención de apelar. No obstante, propuso medidas para evitar la desinversión exigida por el gobierno.
Entre las propuestas de Google se incluye la apertura de su intercambio de anuncios para que los servidores de anuncios rivales puedan acceder a los montos de las ofertas en tiempo real para anuncios web abiertos. Asimismo, la compañía se ofreció a desaprobar las reglas de precios unificados para anuncios display web abierto, permitiendo a los editores establecer diferentes precios mínimos para distintos postores que utilicen Google Ad Manager.
Google argumenta que estas soluciones podrían implementarse en un plazo de nueve a doce meses, evitando así la interrupción para millones de anunciantes y editores que dependen de sus plataformas AdX y DFP, lo que ocurriría en caso de una desinversión prolongada. La compañía busca con estas propuestas remediar las conductas sancionables señaladas por el tribunal, aunque este último también advirtió sobre una cultura generalizada de incumplimiento de obligaciones legales y éticas por parte de Google.