Este sábado 10 de mayo fueron presentados oficialmente el escudo y el lema del Papa León XIV, símbolos que acompañarán su pontificado y que reflejan profundamente su espiritualidad y misión. Junto a la imagen oficial del nuevo Pontífice, el Vaticano dio a conocer estos emblemas que tienen una marcada inspiración agustiniana.
El escudo de León XIV mantiene el diseño que utilizó en su consagración episcopal. Está dividido en diagonal: la parte superior, de color azul, contiene un lirio blanco; en la parte inferior, sobre fondo claro, se observa un libro cerrado con un corazón atravesado por una flecha, un símbolo representativo de la Orden de San Agustín. Esta imagen remite a la experiencia personal de conversión de San Agustín, quien expresó: «Has traspasado mi corazón con tu Palabra».
El lema elegido, In Illo uno unum (“En Aquel uno, uno solo”), fue tomado de un sermón de San Agustín sobre el Salmo 127. Esta frase destaca la idea de que, aunque los cristianos sean muchos, en Cristo forman una sola unidad. Con este lema, León XIV subraya su compromiso con la comunión dentro de la Iglesia, uno de los pilares del carisma agustiniano.
En una entrevista anterior, el entonces cardenal Prevost explicó que la comunión y la unidad son esenciales para su visión pastoral. En plena sintonía con el espíritu del Sínodo, el Papa reafirma su intención de fomentar una Iglesia unida, participativa y misionera, siguiendo el legado de San Agustín como guía espiritual y teológica de su pontificado.