El dólar estadounidense experimentó una significativa caída este viernes, profundizando sus pérdidas anuales a más del 7%, luego de que el presidente Donald Trump reviviera sus amenazas de imponer nuevos y elevados aranceles a la Unión Europea. Esta situación ha reavivado las preocupaciones de los inversores sobre la política comercial global, llevando al Índice Bloomberg Dollar Spot a descender hasta un 0.6%, acercándose a su nivel más bajo desde diciembre de 2023. La propuesta de Trump de un arancel del 50% sobre los productos de la UE, justificada por la falta de progreso en las negociaciones, frenó el avance del euro frente al dólar.
La renovada debilidad del dólar tuvo un impacto inmediato en el mercado de divisas. A pesar de los acuerdos recientes de la administración Trump con algunos países, la incertidumbre generalizada ha disminuido el atractivo del dólar como activo de refugio seguro. Aroop Chatterjee, estratega de Wells Fargo, advirtió que el aumento de los aranceles a las importaciones de la UE incrementa el riesgo de una posible recesión en Estados Unidos, sumado a una mayor incertidumbre política y económica. Esta situación ha beneficiado a otras monedas; el euro, el yen y el franco suizo han experimentado un fortalecimiento frente a la divisa estadounidense.
Expertos del mercado señalan que el dólar está entrando en una tendencia de debilitamiento a largo plazo, a medida que los inversores internacionales reducen sus posiciones en activos estadounidenses. Jane Foley, estratega de Rabobank, indicó que las preocupaciones sobre el presupuesto, la inflación o el crecimiento en EE. UU. están haciendo que los inversores sean más cautelosos. Los operadores especulativos han acumulado posiciones significativas apostando por el debilitamiento del dólar, alcanzando el nivel más alto desde septiembre, según datos de la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos.
Además de las amenazas a la UE, Trump también advirtió con aplicar un impuesto del 25% a Apple Inc. si la compañía no traslada la fabricación del iPhone a Estados Unidos. Esta amenaza adicional provocó una caída en el precio de las acciones de Apple y exacerbó la sensación de impredecibilidad política. Estrategas de Bank of America, como Michalis Rousakis y Claudio Piron, destacaron que las preocupaciones fiscales han generado una renovada debilidad en el dólar, y que la incertidumbre arancelaria ha pasado de ser un factor cíclico a uno estructural, lo que sugiere un impacto más duradero en la moneda.