La Organización Meteorológica Mundial (OMM) informó que durante los próximos cinco años el Ártico experimentará un calentamiento que será más de tres veces superior al promedio global. Este fenómeno destaca la aceleración del cambio climático en esta región sensible y plantea un reto para los esfuerzos internacionales en mitigación ambiental.
Según el informe, existe una probabilidad del 80% de que al menos uno de los próximos cinco años registre temperaturas récord a nivel mundial. Además, se prevé que la temperatura media global podría superar el límite de 1.5 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales, un umbral considerado crítico para evitar impactos climáticos graves.
El aumento desproporcionado en la temperatura del Ártico puede desencadenar consecuencias severas, como el deshielo acelerado, la pérdida de hábitats y la alteración de patrones climáticos globales. La OMM enfatiza la urgencia de fortalecer políticas climáticas para enfrentar estos retos y proteger los ecosistemas y comunidades afectadas.
Estos datos subrayan que el calentamiento global sigue siendo una amenaza creciente, y que la región polar se convierte en un indicador clave para medir el avance del cambio climático y la efectividad de las acciones mundiales para frenarlo.