La confianza del consumidor en Estados Unidos registró un notable aumento en mayo, alcanzando los 98 puntos desde los 85.7 de abril, según datos de The Conference Board. Esta mejora refleja un cambio en la percepción pública, alentado por la reciente pausa en las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
El repunte se dio después de cinco meses consecutivos de caídas, marcando un cambio de tendencia significativo. Stephanie Guichard, economista principal de The Conference Board, explicó que la mejora ya se notaba antes del acuerdo comercial alcanzado el 12 de mayo, pero que cobró fuerza tras el anuncio oficial.
Este avance fue superior a las previsiones, que anticipaban una recuperación más modesta, con un índice estimado de 87 puntos. Aun así, economistas como Carl Weinberg, de High Frequency Economics, advierten que los niveles actuales siguen siendo bajos en términos históricos y que los consumidores continúan preocupados por la inflación y el impacto de posibles nuevos aranceles.
A pesar del optimismo en indicadores como las perspectivas de empleo e ingresos, las opiniones sobre el mercado laboral actual se deterioraron por quinto mes consecutivo. La tregua arancelaria temporal anunciada por la administración Trump ha contribuido a la mejora del ánimo, aunque persisten incertidumbres sobre la política comercial hacia Europa y sus efectos en la economía estadounidense.
