La gobernadora Maru Campos puso en marcha el programa “Juntos Construimos” desde la Escuela Secundaria 3044 de la ciudad de Chihuahua, con el objetivo de intervenir la infraestructura de 45 centros educativos de nivel básico en la capital, lo que beneficiará a cerca de 13 989 estudiantes.
Durante el evento, se entregaron nuevos mobiliarios como butacas, escritorios para docentes, pizarrones, además de luminarias, aires evaporativos, pintura, balones deportivos y material de mantenimiento. Asimismo, se anunció que se incluirá rehabilitación de sanitarios, canchas, repintado de cruces peatonales y mejoras en espacios exteriores vinculados a los planteles.
Maru Campos subrayó su compromiso por garantizar que niñas, niños y adolescentes “cuenten con espacios seguros y de calidad”, y enfatizó que los estudiantes “no están solos” y que su administración está para respaldarlos.
- La iniciativa de equipamiento y mejora de infraestructura es una respuesta directa al rezago educativo y a la necesidad de espacios dignos, lo cual es encomiable.
- Sin embargo, al tratarse de una primera fase de 45 escuelas, es esencial conocer los criterios de priorización: qué planteles accederán, cómo se distribuyen en términos geográficos y si las zonas más vulnerables están efectivamente contempladas.
- El verdadero impacto dependerá de la sostenibilidad de la intervención: la obra podrá mejorar el entorno físico, pero también se necesita que se vincule con mejoras en operación educativa, mantenimiento continuo, participación comunitaria y uso del espacio.
- Finalmente, estos programas tienen un potencial simbólico importante para la gobernanza, pero la transparencia, los plazos de ejecución, la rendición de cuentas y la medición de resultados serán clave para que no se perciba como un evento puntual, sino como un avance estructural en educación.






