Paul McCartney sorprendió al anunciar que su próximo lanzamiento será una canción sin una sola nota. El tema, compuesto únicamente por silencio, funciona como una protesta directa contra un proyecto de inteligencia artificial que planeaba recrear su voz para producir música sin su autorización. El ex-Beatle calificó la iniciativa como una invasión creativa y un riesgo para los derechos de los artistas.
El músico explicó que la decisión de publicar una obra silenciosa no es un gesto satírico, sino un mensaje contundente para la industria tecnológica y las plataformas que utilizan IA para generar contenido basado en imitaciones de artistas reales. Señaló que la voz es parte fundamental de la identidad de un intérprete y que ningún algoritmo debería replicarla sin permiso.
Además, McCartney expresó preocupación por el impacto que estas herramientas podrían tener en la música contemporánea, especialmente para nuevos creadores que verían su labor opacada por modelos entrenados con obras ajenas. Aseguró que la creatividad humana debe seguir siendo el centro de la industria, incluso en una época dominada por tecnologías emergentes.
El lanzamiento de la canción silenciosa está previsto para finales de año y ya ha generado debate entre músicos, productores y especialistas en derechos digitales. Algunos ven la decisión como un acto artístico disruptivo; otros, como una advertencia sobre el futuro de la música en la era de la inteligencia artificial.







