El Índice de Salarios total en Argentina registró un aumento del 3.2% en agosto respecto al mes anterior, logrando, por segundo mes consecutivo, ubicarse por encima de la inflación mensual, que fue del 2.5%. Este dato, revelado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), muestra una leve recuperación del poder adquisitivo del trabajador en el corto plazo.
La subida salarial estuvo impulsada principalmente por el Sector Privado Registrado (+3.3%) y el Sector Público (+3.2%). Sin embargo, los salarios del Sector Privado No Registrado (informal) apenas crecieron 2.5%, lo que subraya la persistente desigualdad de la crisis en el mercado laboral, donde los trabajadores informales son los más vulnerables a la pérdida de poder de compra.
Críticamente, a pesar de las ganancias mensuales, el balance anual es negativo. De forma interanual, el Índice de Salarios creció un 49.1%, quedando 2.3 puntos porcentuales por debajo de la inflación acumulada (51.4%). Este rezago anual es la principal preocupación económica, ya que impacta la calidad de vida de las familias y es un factor clave en el aumento de los niveles de pobreza, que han escalado a cifras históricas.
El desafío pendiente para la economía argentina es mantener un crecimiento salarial sostenido y generalizado, especialmente en el sector no formal, que supere la inflación de forma consistente para recuperar el poder adquisitivo perdido en periodos de alta volatilidad y devaluación.







