Un colectivo de empleados de La Casa de Toño presentó al menos 209 denuncias ante autoridades laborales de la CDMX y del Estado de México, señalando posibles prácticas irregulares en la cadena de restaurantes, entre las que destacan la apropiación indebida de propinas —las cuales legalmente deben formar parte del salario-integrado—, así como descuentos y cobros ilegales que podrían alcanzar hasta 20 millones de pesos mensuales para la empresa.
Adicionalmente, los trabajadores denunciaron jornadas laborales excesivas (hasta 12 horas), sólo un día de descanso por semana, falta de equipo de protección adecuado, sanciones económicas arbitrarias, venta obligatoria de uniformes y —graves— acoso sexual por parte de mandos medios. En conjunto, estos hechos señalan múltiples incumplimientos a la normativa laboral vigente en México.
- La acumulación de denuncias por propinas y descuentos indica una posible falta de transparencia en la cadena laboral entre trabajadores y empresa, con implicaciones para seguridad social, impuestos y derechos laborales.
- Más allá del volumen de quejas, el reto estructural será que esta situación sea investigada por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y demás instancias competentes, para que no quede en una controversia mediática sino en sanciones y corrección de prácticas.
- Estas denuncias se suman a un patrón más amplio en el sector restaurantero, donde la informalidad, sobrecarga laboral y desconocimiento de derechos son frecuentes; por ello, el caso adquiere relevancia como señal de alerta sobre condiciones laborales en cadenas de servicio masivo.
