Por Eduardo López Chávez
Apenas se dio a conocer que el nuevo ciclo escolar iniciará el próximo 24 de agosto en la modalidad a distancia, situación que era de esperarse y que pone en el centro de la discusión algo que hasta el momento se había pasado por alto.
¿Cuál es la nueva normalidad en tema educativo?; en nuestro país hay un fenómeno muy interesante que desde hace mucho tiempo he señalado, hablar de educación es hablar de dinero, sindicalismo y corrupción, pero en ningún momento se habla del fondo, de los sistemas de enseñanza – aprendizaje, los planes de estudio y programas de la diferentes materias, si considera que estoy equivocado conteste a esta pregunta: ¿cuándo fue la última vez que se debatió en el congreso o en algún otro espacio una modernización de los planes y programas de estudio?
La pandemia que vivimos, ha puesto al descubierto muchos de los problemas que sufre el país y la sociedad mexicana, empezando por un lastimoso sistema de salud, hasta la inevitable e incomparable caída económica, recuerde que el INEGI dio a conocer que el PIB en el 2º trimestre de 2020 cayó en un 18.9% con respecto al año anterior mucho más que lo observado en los peores momentos de 1995 y 2009, pero con un gran diferencia, no nos encontrábamos en aquellas épocas confinados en casa.
En todo este entorno se anuncia el retorno a clases, la modalidad presencial solo se retomará cuando el semáforo se encuentre en verde y por supuesto de forma gradual, hasta este punto todo se escucha muy bien, pero el problema de fondo no es cómo iniciará el ciclo, sino saber si realmente estamos preparados para esta situación y sobre todo, si existe la certeza que el 100% de los alumnos de nivel básico, medio y medio superior, podrán acceder a esta modalidad.
Hay que considerar antes que todo que, si bien el acuerdo firmado entre las grandes televisoras (Televisa, TV Azteca, Imagen y Milenio) permitirá estar más cerca de los alumnos, ¿qué sucede si en una casa hay 3 hijos en diferentes grados escolares? ¿las familias tienen todas las posibilidades de tener 3 o más televisiones para ese fin?, el mismo secretario dijo que se busca llegar a 30 millones de estudiantes de 16 grados escolares, a través de 6 canales de televisión, las 24 horas al día, los 7 días a la semana, así mismo, se habló de la radio para aquellas zonas de mayor marginación, ¿todas esas zonas poseen cuando menos energía eléctrica?, esta nueva normalidad requiere cierto gasto y hay mas de 12 millones de mexicanos que en los últimos meses se han quedado sin trabajo.
Por el otro lado de la ecuación, es decir, el magisterio, se mencionó la capacitación a un millón de docentes en plataformas digitales ¿y la capacitación para impartir las clases en esta modalidad?, por que una cosa es saber usar las plataformas y otra muy distinta, saber dar clases; todos aquellos que bloquearon vías de tren y provocaron perdidas económicas muy importantes al inicio de la transformación de cuarta y que se les dio todo cuanto pidieron (plazas) ¿están capacitados para impartir clases?, digo para empezar ¿dan clases?
Siempre se alaba la búsqueda de alternativas para el desarrollo y modernización del sistema educativo en el país, a fin de cuentas y nunca mejor dicho, son esos niños y niñas, el futuro de México, se les debe apostar y se les debe cuidar, el problema está en que, pese a la crisis de salud y económica que ha dejado al descubierto la cruda realidad de la agonía del sistema educativo nacional, no se busque un cambio de fondo, porque, créame esta otra crisis a futuro nos puede costar mucho mas.
