El general Lloyd Austin, Secretario de Defensa de los Estados Unidos, confirmó hoy (08.05.2024) que los Estados Unidos han detenido temporalmente un envío de armas a Israel mientras se evalúa la situación en el enclave palestino de Rafah. Esta decisión fue tomada por el presidente Joe Biden, cuyo gobierno tiene preocupaciones significativas sobre el impacto potencial de una operación militar en esta área en la población civil.
Durante una comparecencia ante un subcomité del Senado, Austin declaró: «Actualmente estamos revisando algunos envíos de asistencia de seguridad a corto plazo en el contexto de los eventos en Rafah». Sin embargo, enfatizó que el gobierno de EE. UU. «aún no ha tomado una decisión final sobre cómo proceder con este envío».
Austin subrayó la prioridad de proteger a los civiles, afirmando: «Preferiríamos evitar enfrentamientos importantes en Rafah, pero nuestro enfoque principal es garantizar la seguridad de los civiles». El cargamento retenido consiste en «municiones de alto calibre», señaló.
Este movimiento marca un posible cambio en la política de suministro de armas a Israel por parte de EE. UU. El Pentágono confirmó la información previamente reportada por varios medios, incluida CNN, que detalló que el cargamento incluye 3.500 bombas: 1.800 de 2.000 libras (907 kilos) y 1.700 de 500 libras (226 kilos).
A pesar de esto, Austin reiteró el compromiso inquebrantable de EE. UU. con la seguridad de Israel. La preocupación principal del gobierno de Biden radica en el posible impacto de las bombas más pesadas en áreas urbanas densamente pobladas, similar a lo observado en otras partes de Gaza.
El embajador de Israel ante la ONU expresó su decepción por esta decisión.
Con información de DW Noticias | Nota original
