La candidata de Morena a la presidencia de México, Claudia Sheinbaum Pardo, proclamó durante una gira por el Estado de México y Tlaxcala que su ascenso al poder estará respaldado por resultados tangibles. En Chalco, destacó los éxitos del gobierno de la Cuarta Transformación, prometiendo seguir el legado de Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, en un evento previo en Los Cabos, Sheinbaum causó revuelo al sugerir que López Obrador alcanzó la presidencia por ambición personal, mientras que ella busca justicia y bienestar para México.
Ante multitudes entusiastas, Sheinbaum detalló los logros sociales y económicos de su partido, incluyendo programas de apoyo financiero y educativo. En cada discurso, reiteraba el compromiso de su movimiento con los principios de justicia y transformación social, enfatizando la diferencia entre su motivación y la de López Obrador.
Sin embargo, la campaña de Sheinbaum no estuvo exenta de controversia. Durante un discurso en Los Cabos, sus comentarios sobre la ambición personal de López Obrador causaron sorpresa y malestar entre algunos de sus seguidores, evidenciando tensiones dentro de su propio partido. A pesar de intentar corregir sus palabras al final del evento, la pifia fue ampliamente difundida en las redes sociales.
Además, el mitin en Los Cabos estuvo marcado por protestas y disrupciones, con manifestantes expresando su descontento por decisiones internas del partido, como la exclusión de ciertos candidatos en las elecciones locales. Sheinbaum tuvo que intervenir para calmar la situación, destacando la importancia del diálogo y la escucha en un clima político tenso.
A pesar de los desafíos y controversias, Sheinbaum continuó con su agenda de campaña, prometiendo transformación y bienestar para México. Su discurso enfatizó la necesidad de un gobierno comprometido con los intereses del pueblo y la nación, aunque las críticas y las tensiones internas pusieron a prueba su liderazgo y su capacidad para mantener la cohesión dentro de su partido.
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