Desde el 1 de octubre, plataformas digitales como Airbnb estarán obligadas a incluir el Impuesto General a las Ventas (IGV) en sus tarifas en Perú. Esta nueva normativa permitirá a la Sunat acceder a información detallada de los arrendadores que utilizan la plataforma, facilitando así un mayor control tributario.
El Ministerio de Economía y Finanzas ha establecido que la Sunat identificará a los arrendadores que alquilan múltiples inmuebles de forma habitual, considerándolos como empresas inmobiliarias. Esto podría llevar a que algunos propietarios, que actualmente pagan un 5% de Impuesto a la Renta (IR), deban tributar un 29.5%, equiparándolos con empresas.
El especialista en tributación, Octavio Salazar, explicó que esta medida afectará principalmente a quienes arriendan varios inmuebles a través de Airbnb. A diferencia de una empresa inmobiliaria, que maneja una contabilidad formal y contratos a largo plazo, muchos de estos arrendadores operan a corto plazo y sin una estructura empresarial. Salazar también indicó que, en caso de ser catalogados como empresas, los propietarios tendrían que considerar opciones jurídicas como una sociedad anónima cerrada.
Finalmente, se ha dispuesto que las plataformas digitales no domiciliadas en Perú deberán inscribirse en el Registro Único de Contribuyentes (RUC) para declarar y pagar el IGV. Sin embargo, es probable que muchas de ellas opten por dejar la recaudación en manos de las entidades financieras, lo que podría generar nuevas comisiones para los usuarios.
4o