9 de noviembre de 2024 11:15 pm

Chile en Nogada: ¿Capeado o sin Capear? Una disputa de sabor y tradición

El debate sobre si el Chile en Nogada debe servirse capeado o sin capear divide a chefs y comensales, reflejando tanto la herencia culinaria como las tendencias actuales de la gastronomía mexicana.

El Chile en Nogada, un plato emblemático de la cocina mexicana, no solo es una delicia para el paladar, sino también un reflejo de la rica historia y cultura del país. Sin embargo, uno de los debates más acalorados que rodean este platillo es si debe servirse capeado o sin capear. Esta disputa culinaria divide opiniones entre aquellos que prefieren la versión tradicional y quienes optan por una opción más ligera y contemporánea.

La versión capeada tiene sus raíces en la cocina barroca poblana, una tradición que las monjas agustinas del convento de Santa Mónica instauraron al crear este platillo para Agustín de Iturbide en 1821. En este estilo, el chile poblano se recubre con una ligera capa de huevo batido y se fríe, lo que no solo añade una textura crujiente, sino que también sella los sabores del relleno, potenciando la riqueza de la nogada.

Por otro lado, la tendencia actual de servir el Chile en Nogada sin capear ha ganado popularidad en muchos restaurantes, argumentando que sin el capeo se puede disfrutar mejor la frescura del chile y la suavidad de la salsa de nogada. Los defensores de esta versión contemporánea consideran que es más ligera y permite que los ingredientes se destaquen por sí mismos, en lugar de estar ocultos bajo la fritura.

Aunque ambos enfoques tienen sus fervientes seguidores, la discusión refleja no solo una preferencia de sabor, sino la evolución de la gastronomía mexicana. Mientras el capeado rinde homenaje a la complejidad de la cocina tradicional, la versión sin capear sigue las tendencias modernas que priorizan la frescura y la simplicidad. Sin duda, este debate seguirá siendo parte del orgullo que representa el Chile en Nogada en la mesa mexicana.

OPINIÓN