OPINIÓN

Primeras Cartas a Claudia

...Sheinbaum y Marcelo Ebrard tienen la oportunidad de establecer una mejor relación con el USTR y con el congreso de Estados Unidos que la de sus predecesores. Una respuesta oportuna y adecuada a ambas cartas sería el inicio...

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Con la información derivada de la toma de protesta de Claudia Sheinbaum, poca atención recibieron las cartas de dos grupos de congresistas estadounidenses que esperan que el nuevo gobierno de México tenga una actitud más cooperativa en temas relacionados con el TMEC. En una, se pide a la presidenta evite la entrada de autos chinos a territorio mexicano porque pueden representar una amenaza de seguridad para la región, y la otra solicita a la Representante Comercial de Estados Unidos (USTR), Katherine Tai, y al Secretario de Agricultura, Tom Vilsack, no desatender el problema del maíz transgénico, siendo México el principal destino de las exportaciones de Estados Unidos de este grano.

Aunque el gobierno de López Obrador descartó otras cartas de legisladores de Estados Unidos argumentando que eran el resultado de intereses electorales, estas reflejan los intereses de los votantes de quienes las firman, ayudan a documentar las acciones implementadas sobre algún tema y justifican la postura de los firmantes respecto a diversos problemas. Además, pueden establecer tiempos y lineamientos y requieren al menos un acuse de recibo de las autoridades de la Unión Americana a las que van dirigidas.

A diferencia de México, la mayoría de los miembros del congreso estadounidense sigue una agenda propia en base a las prioridades de los votantes de su estado o distrito electoral, quienes financian en su totalidad sus campañas. En Estados Unidos no hay legisladores plurinominales, por lo que la influencia del líder del partido es menor que en nuestro sistema. Además, la profunda división que existe en ambas cámaras complica más la toma de decisiones y requiere que el presidente negocie con los líderes de ambos partidos, tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado, para poder aprobar cualquier proyecto de ley.

La representante Elissa Slotkin (Michigan) y el senador Sherrod Brown (Ohio) encabezan a un grupo de 21 legisladores demócratas de ambas cámaras que piden a Sheinbaum evitar la entrada de autos chinos a territorio mexicano argumentando que sus sistemas electrónicos de navegación pueden recabar información que puede ser utilizada por el gobierno chino. Este es un argumento que se ha venido manejando en el Capitolio desde hace algunos meses para justificar el aumento en los aranceles a los autos producidos en China. Varios de los firmantes de la carta pertenecen al Comité Selecto sobre el Partido Comunista China de la Cámara de Representantes y otros dos al Comité de Finanzas, responsable de la revisión del TMEC en el Senado.

En esta misma carta se solicita que el gobierno de Sheinbaum, y los gobiernos estatales, no otorguen ningún tipo de incentivo a las empresas que tengan relación con el Partido Comunista Chino. Se pide establecer un proceso para evaluar los riesgos que pueda representar a nivel regional la venta de autos chinos – en base al memorándum de entendimiento firmado en diciembre del 2023 por las autoridades hacendarias de ambos países – y tener una reunión de alto nivel a principios del 2025 entre las autoridades comerciales y financieras de ambos países para analizar las maneras como ambas naciones pueden trabajar en conjunto.

Por su parte, el representante demócrata Randy Feestra (Iowa) promovió la carta dirigida a la embajadora Tai y al secretario Vilsack tanto porque el decreto del 14 de febrero de 2023 sigue vigente, como porque este año se espera que México compre a Estados Unidos más de 5,100 millones de dólares en maíz, lo que representaría un nuevo récord histórico, sobre todo cuando las exportaciones agrícolas de otros productos en otras regiones han disminuido por diversos factores.

La carta de Feestra está firmada por otros 20 congresistas de ambos partidos que representan 12 de los 13 principales estados productores de maíz en Estados Unidos, 14 de ellos miembros del Comité de Agricultura de la cámara baja y cuatro del Comité de Medios y Procedimientos (Ways & Means), responsable de la revisión del TMEC en la Cámara de Representantes. La petición de estos legisladores ocurre cuando se espera el reporte preliminar del pánel sobre maíz transgénico, con un resultado en contra de México. El reporte final deberá publicarse entre la segunda quincena de noviembre y la primera de diciembre.

Sheinbaum y Marcelo Ebrard tienen la oportunidad de establecer una mejor relación con el USTR y con el congreso de Estados Unidos que la de sus predecesores. Una respuesta oportuna y adecuada a ambas cartas sería el inicio.

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