El Producto Interno Bruto (PIB) de la OCDE creció un 0.5% entre julio y septiembre, según reportó la organización este jueves. Este ritmo de expansión, ligeramente superior al 0.4% del segundo trimestre, refleja un desempeño desigual entre las economías miembro. Mientras Estados Unidos y Francia lideraron el crecimiento, países como Canadá, Japón e Italia registraron desaceleraciones significativas.
En el G7, el crecimiento general se mantuvo en 0.5%. Estados Unidos sostuvo un avance estable del 0.7%, pero Canadá y Japón vieron su expansión reducirse al 0.2%. Reino Unido apenas creció un 0.1%, e Italia se estancó tras una caída de dos décimas. Por el contrario, Francia duplicó su crecimiento al 0.4%, impulsada por el consumo privado asociado a los Juegos Olímpicos de París. Alemania también mostró signos de recuperación, registrando un 0.2% frente a la contracción previa del -0.3%.
A nivel general, Irlanda (2%), México (1.3%) y Lituania (1%) lideraron el crecimiento trimestral dentro de la OCDE, mientras que Hungría (-0.7%), Letonia (-0.4%) y Suecia (-0.1%) presentaron los peores registros. En términos interanuales, Eslovaquia, Portugal y Polonia experimentaron las mayores mejoras, mientras que Australia y Austria registraron caídas notables.
En el caso de España, el PIB creció un 0.8% en el tercer trimestre, superando en tres décimas el promedio de la OCDE y en cuatro la media de la zona euro. En comparación con niveles prepandémicos, la economía española se sitúa un 6.6% por encima del último trimestre de 2019, mostrando una recuperación sólida frente a otras economías europeas como Alemania y Finlandia, que apenas superan los niveles de 2019.