Fernanda Álvarez Morphy
Internacionalista con experiencia en proyectos educativos, ambientales y migratorios en Latinoamérica y Estados Unidos.
Escuchar
Durante 6 años México se ausento de la arena internacional, en su sexenio el presidente López Obrador brillo por su ausencia en foros internacionales dando prioridad a la política interna de México. Dejo todo el manejo de la política exterior de nuestro país en manos del secretario de relaciones exteriores y nunca en 6 años se le vio salir del país; recibió a dignatarios durante su gestión como Joe Biden y se gestiono la CELAC pero él mismo nunca salió del territorio mexicano. Esto cambio esta semana cuando la presidenta Claudia Sheinbaum rompió con esto viajando a Brasil para participar del G20; esto solo dentro de sus primeros 2 meses y 100 días como líder de nuestro país.
Lo primero más importante a notar es como fue una de las pocas mujeres en asistir a esta reunion de líderes mundiales que representan a 2 tercios de la población mundial; y aunque su participación fue breve y deja mucho que desear, también nos muestra cuales son sus prioridades. Dentro de este foro vimos como, al igual que su predecesor, impulsaba el programa Sembrando Vida para acciones climáticas. La diferencia se encontró en que no solo dio propuestas al aire, pero las acompaño de más que solo ideas, si no presento propuestas completas y con ideas de financiamiento (en este caso con el 1% del presupuesto armamentista global que asciende a los trillones de dólares). Siendo honestos, llego con propuestas llenas de buenos deseos e idealistas a un foro donde las voces más grandes mantienen otras prioridades. Personalmente, le doy puntos por mantenerse dentro del tema de la sesión y utilizar los conocimientos que tiene para defenderse.
Puede que hasta el momento solo viéramos como Claudia solo iba a ser una continuación de AMLO, siguiendo con sus proyectos y políticas; pero con esto vemos como puede que comparta las ideas pero no la visión. En otros aspectos, como la economía o la política interior todavía espero a ver este quiebre, pero si la diferencia en el manejo de México con el exterior es algo por lo cual guiarnos, en mi opinion, no va por mal camino. Aunque si hay mucho más que podría hacer en temas de política exterior este no es un mal comienzo a su sexenio.
Tal vez me este viendo muy idealista, pero quiero creer que las cosas pueden mejorar para el país. Claro, no va a romper con la base que le dejo AMLO por varias razones: necesita la fuerza política de MORENA para poder gobernar, la base que le dejo nuestro antiguo presidente fue lo que la impulso al puesto. Sin embargo, quiero creer que esta visita internacional, además de su muy distinta formación académica, son señales de que puede tener las mismas ideas pero otro rumbo. Sigo siendo escéptica de a donde nos pueda llevar, y su liderazgo en la Ciudad de México ha dejado mucho que desear como historial, pero aún quiero tener fé en que las cosas no están perdidas aún.