El autobús eléctrico Taruk, fabricado por Megaflux, ha obtenido la certificación «Hecho en México», un distintivo que confirma su origen y producción nacional. Esta certificación fue entregada en un evento oficial encabezado por el Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, marcando un hito en la industria del transporte eléctrico del país.
Con capacidad para 60 pasajeros, Taruk fue diseñado para adaptarse a las condiciones urbanas de México, ofreciendo una alternativa viable y sostenible al transporte público. A diferencia de otros modelos eléctricos importados, este autobús se produce íntegramente en el país, lo que genera más empleos y reduce costos operativos.
Roberto Gottfried, director general de Megaflux, destacó que esta iniciativa no busca cerrar el mercado a productos extranjeros, sino fortalecer la industria local para que México pueda desarrollar su propia tecnología en movilidad eléctrica. «No se trata de excluir a nadie, sino de abrir más oportunidades desde el interior del país», afirmó.
Una de las principales ventajas de Taruk es que su producción y mantenimiento se realizan en México, evitando la dependencia de refacciones extranjeras y fluctuaciones del tipo de cambio. Además, según Megaflux, cada unidad genera cinco veces más valor y ocho veces más empleos que un autobús importado.
A lo largo de 2025, Taruk será sometido a pruebas operativas en distintas ciudades de México, evaluando su desempeño en condiciones reales para su futura implementación en el transporte público. Con esta iniciativa, México busca posicionarse como un referente en movilidad eléctrica, compitiendo directamente con los modelos chinos que dominan el mercado actual.