En un desenlace poco común, los Philadelphia Phillies vencieron 3-2 a los Boston Red Sox la noche del lunes gracias a una interferencia del cátcher con las bases llenas en la décima entrada. El episodio marcó la primera vez desde 1971 que un equipo gana por esta vía en las Grandes Ligas.
Brandon Marsh, corredor automático en segunda, anotó la carrera de la victoria cuando el bate de Edmundo Sosa rozó el guante del receptor Carlos Narváez en un intento de swing. Aunque inicialmente se marcó bola, los Phillies solicitaron una revisión que confirmó la interferencia, otorgando la base y, con ella, la carrera del triunfo sin que los locales conectaran un solo hit en el inning.
Zack Wheeler fue clave para los Phillies con una sólida actuación de seis entradas, siete hits, dos carreras y 10 ponches. El bullpen brilló también, destacando Max Lazar (1-0), quien se llevó su primera victoria en MLB. Por Boston, Walker Buehler lanzó siete entradas con sólo una carrera limpia permitida.
Los Red Sox habían empatado el juego 2-2 en la sexta con un sencillo productor de Trevor Story, luego del jonrón solitario de Jarren Duran al inicio del encuentro.
En el plano ofensivo, Bryce Harper continúa encendido con 14 hits y 13 extrabases en sus últimos ocho juegos, contrastando con los siete que había logrado en los 25 anteriores.