La Unión Nacional de Cañeros CNPR alerta sobre una crisis crítica en el sector cañero, marcada por la caída del precio del azúcar y el alto costo de producción. Carlos Blackaller Ayala, su presidente, señaló pérdidas de ingresos del 27 % en el ciclo 2024/2025, estimadas en 14 500 millones de pesos, y advirtió que estas podrían aumentar en otros 7 000 millones si no se actúa con prontitud.
El gremio propuso al gobierno federal una serie de medidas urgentes: exigencia de permiso previo para importar azúcar, incremento de aranceles (hasta 720 USD por tonelada), creación de una normativa para evitar la clasificación indebida de azúcar como «mezcla alimenticia», y refuerzo de controles aduaneros para combatir el contrabando .
Adicionalmente, exhortan a que el sector forme parte del programa “Cosechando Soberanía”, lo que permitiría canalizar apoyos tecnológicos e infraestructura al campo cañero. También demandan una política de reciprocidad para la importación de fructosa, equivalente a la que aplica al azúcar mexicana, y controles más estrictos sobre las empresas del programa IMMEX, para evitar que el edulcorante importado se reinyecte ilegalmente en el mercado doméstico.
En conjunto, la caída sostenida de precios, la competencia desleal y los altos costos ponen en jaque la rentabilidad de más de 180 000 productores. La falta de acción podría profundizar una crisis socioeconómica en decenas de municipios rurales.