Entre la neblina de los canales y el sonido de tambores ancestrales, Xochimilco vuelve a vibrar con “La Llorona. El último latido del agua”, un espectáculo que combina teatro, danza y música en vivo para rendir homenaje tanto a una de las leyendas más icónicas del país como al vital recurso hídrico que ha dado vida a esta región durante siglos.
Esta experiencia inmersiva, que se presenta cada año desde 1993, es impulsada por los propios habitantes de Xochimilco: agricultores, remeros y chinamperos que transforman la Laguna de Tlilac en un escenario natural lleno de misticismo. La obra cobra aún más fuerza en esta edición al centrar su mensaje en la urgencia de proteger el agua, un bien que hoy enfrenta una grave crisis.
El recorrido comienza al abordar una trajinera en el Embarcadero Cuemanco. A lo largo de 45 minutos de navegación nocturna, antorchas y sonidos de la naturaleza transportan al público a un entorno mágico. En la isla, el grupo Nahui Teotls fusiona instrumentos prehispánicos —como el huehuetl o el teponaxtle— con elementos contemporáneos, creando una puesta en escena única.
Con el respaldo de la comunidad y de autoridades locales, esta obra se mantiene como un símbolo de resistencia cultural. Más que un espectáculo, es una llamada a reconocer nuestras raíces y a cuidar el ecosistema que las sostiene. Estará disponible del 3 de octubre al 16 de noviembre, únicamente los fines de semana.