El fabricante chino BYD (Build Your Dreams) dio un paso clave en su expansión latinoamericana al lanzar oficialmente la venta de vehículos eléctricos e híbridos en Argentina. La compañía se apoya en una nueva medida del gobierno argentino que permite importar hasta 50,000 unidades sin aranceles durante 2026, una estrategia para reactivar el mercado de movilidad sustentable.
Los modelos ofertados son el SUV eléctrico Yuan Pro, el SUV híbrido enchufable Song Pro y el eléctrico compacto Dolphin Mini. Todos presentan precios de referencia por debajo de 16,000 dólares (antes de impuestos y tasas), lo que les permite posicionarse como opciones competitivas frente a los autos tradicionales. BYD cuenta con una asignación inicial para importar aproximadamente 7,800 ejemplares bajo el esquema arancelario preferencial.
El contexto para esta operación es particularmente favorable: Argentina ha aplicado un subsidio arancelario directo, eliminando la carga del 35 % que usualmente grava autos importados que no provienen de entidades del Mercosur. Además, en los primeros ocho meses de 2025 sólo se vendieron 486 vehículos eléctricos de un total de 421,000 unidades nuevas, lo que revela un mercado con enorme potencial latente.
Aunque la medida abre una ventana para BYD y otros fabricantes chinos de bajo costo, el cambio también genera resistencia en sectores industriales locales que temen que esta afluencia de importaciones afecte empleos y producción nacional automotriz, especialmente en Brasil.