Durante su reporte del tercer trimestre de 2025, Grupo Bimbo informó que espera cerrar el año con inversiones de capital (CapEx) de aproximadamente US$1 300 millones, lo que representa una reducción de cerca del 35 % respecto al monto de US$2 000 millones registrado hace tres años.
El director global de Finanzas, Diego Gaxiola, explicó que esta disminución no obedece a una cancelación de proyectos, sino al hecho de que sus planes de crecimiento actuales demandan menor capital que en periodos anteriores.
Entre julio y septiembre la empresa invirtió US$728 millones, lo que representa una caída de entre 30 y 33 % respecto al mismo periodo del año pasado.
La mayor parte de las inversiones planificadas para 2025 se destinarán a mantenimiento —con un gasto relativamente estable— y a incrementar la productividad, en particular con un proyecto de transformación en Estados Unidos.
Desde un enfoque crítico, esta estrategia encierra varios matices:
- Por un lado, la reducción del CapEx puede interpretarse como un signo de prudencia financiera y madurez en el crecimiento: si la empresa considera que sus oportunidades de expansión requieren ahora menos capital, podría estar optimizando su retorno sobre inversión.
- Por otro lado, esta contracción de la inversión en un momento global de incertidumbre (inflación, volatilidad cambiaria, presión en consumo) puede indicar que la compañía está anticipando un menor dinamismo de mercado o que está priorizando la eficiencia sobre la expansión, lo cual podría afectar su posicionamiento.
- Finalmente, cabe preguntar qué tan rígidos son los recortes en inversión: si bien Bimbo afirma que no está cancelando proyectos, el aplazamiento o reducción de ritmo puede traducirse en pérdida de ventajas competitivas o retrasos tecnológicos.
En resumen, el ajuste de inversión de Grupo Bimbo prepara el terreno para una fase de menor intensidad de capital, centrada en mantenimiento y productividad, más que en expansión agresiva. El éxito dependerá de que esos recursos reduzcan costos y mejoren desempeño sin comprometer el crecimiento y la competitividad internacional de la empresa.






