La Liga Sindical Obrera Mexicana (LSOM) convocó a las empresas con contratos colectivos a iniciar un proceso de “recuperación” del salario que se pacta en dichos convenios, dado que en las últimas décadas ese ingreso ha perdido entre 60 % y 80 % de su poder adquisitivo. 
Dirigentes sindicales afiliados a empresas como Goodyear México, Pirelli México, Contitech Mexicana, Teklas Automotive y Dimex (antes 3M) anunciaron que no aceptarán argumentos empresariales basados en incertidumbres comerciales —como la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC)- para justificar la falta de aumentos. 
En conferencia de prensa, el secretario general de la LSOM expresó que mientras el salario mínimo ha experimentado ajustes, los salarios pactados en convenios colectivos se han estancado, generando brechas crecientes entre los trabajadores que laboran bajo contrato y la canasta básica. 
Visión crítica:
- Es positivo que los trabajadores demanden una recuperación real de su nivel de ingreso: la pérdida del 80 % del valor que mencionan es una señal contundente de deterioro salarial estructural.
- Sin embargo, el desafío es considerable: que los contratos colectivos se actualicen no depende únicamente de voluntad sindical o patronal, sino de la rentabilidad de las empresas, la productividad, el entorno macroeconómico y la formalización laboral.
- También es importante que este reclamo no se quede sólo en la urgencia de aumentos nominales, sino que incluya planes de modernización, productividad compartida, formación y mejora continua, para que los salarios elevados vayan acompañados de empleos más sólidos.
 En suma, la LSOM marca la pauta para las negociaciones de 2026: exige que las empresas y sindicatos retomen el diálogo salarial con seriedad y justicia distributiva, si se pretende revertir décadas de pérdida real de ingresos para los trabajadores mexicanos.
 
								 
								 
				 
															



 
								


