El Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY) ha lanzado su Observatorio Social como el eje de su nueva estrategia, buscando catalizar la investigación, las políticas públicas y las acciones del sector privado para impulsar la movilidad social y reducir la pobreza en México. La iniciativa surge en un contexto donde la baja movilidad social es un problema económico estructural que frena el potencial de desarrollo del país.
Datos del CEEY revelan la magnitud del desafío: la mitad de las personas que nacen en el grupo más bajo de recursos económicos no logra superarlo, quedando atrapada en la pobreza. Peor aún, tres de cada cuatro personas provenientes del grupo más bajo hoy se encuentran en situación de pobreza por ingresos. Esta inmovilidad social limita el potencial de contribución del capital humano al desarrollo económico.
El Observatorio se enfocará en evaluar políticas que busquen eliminar las barreras estructurales que perpetúan la desigualdad. Estas barreras incluyen el origen socioeconómico, el color de piel, el bajo nivel educativo de los padres, y el hecho de nacer y crecer en la región sur del país. El estudio muestra que el 75% de quienes tienen padres con educación primaria o menor no alcanzan el promedio nacional de escolaridad, lo que se traduce directamente en menores ingresos.
Críticamente, el CEEY busca que la igualdad de oportunidades sea reconocida como un mecanismo clave para incrementar simultáneamente el potencial de crecimiento económico y mejorar la distribución de sus ganancias. El Observatorio promoverá alianzas estratégicas para que el esfuerzo de las personas, y no su origen, sea el principal factor de su realización económica.







