Heineken ha señalado que sus operaciones en México figuran entre las más eficientes a nivel global en uso de agua. Según declaraciones oficiales, la empresa ha invertido en tecnologías avanzadas para optimizar sus procesos productivos, en línea con su estrategia de sostenibilidad “Brindar un Mundo Mejor”.
Un ejemplo destacado es su planta en Meoqui, Chihuahua, que consume apenas 1.7 litros de agua por litro de cerveza, una cifra sustancialmente inferior al promedio del grupo Heineken. En el conjunto de sus siete plantas mexicanas, el consumo promedio se ha reducido a 2.3 litros por litro, mientras que muchas cerveceras en el mundo utilizan más de 4 litros para producir la misma cantidad.
Además de reducir, Heineken México trabaja bajo tres pilares: reusar el agua tratada en sus procesos internos y regresarparte del recurso a los ecosistemas mediante proyectos de recarga hídrica en zonas con estrés hídrico. Su planta de Meoqui, además de eficiencia, cuenta con sistemas de tratamiento que permiten reutilizar agua en limpieza o riego, evitando descartes innecesarios.
No obstante, el enfoque sustentable también enfrenta desafíos: la reducción de consumo exige inversión constante y el reabastecimiento de acuíferos depende de condiciones climáticas y sociales que escapan al control de la empresa. Además, aunque su eficiencia es una ventaja competitiva, el riesgo de sobreexplotación de fuentes locales persiste, especialmente en contextos secos.







