La Organización Mundial de la Salud (OMS) actualizó sus recomendaciones clínicas para el manejo de pacientes con Covid-19, instando a evitar el uso de antibióticos empíricos cuando no exista una sospecha sólida de infección bacteriana concomitante. Esta recomendación forma parte de la última versión de su guía práctica, basada en un metaanálisis que evaluó los efectos del uso de antibióticos en pacientes con esta enfermedad.
Desde el inicio de la pandemia, la OMS ha ido ajustando sus directrices conforme se ha ido comprendiendo mejor la evolución del virus y sus complicaciones. En esta octava actualización, se destaca una significativa disminución tanto en la incidencia como en la gravedad del Covid-19, así como la integración progresiva de la atención a estos pacientes dentro de los sistemas de salud habituales, dejando atrás las medidas de emergencia.
El documento revisado abarca desde la prevención y detección temprana de la infección hasta el tratamiento y la rehabilitación posterior. En este contexto renovado, se enfatiza la importancia de no recurrir al tratamiento antibiótico sin pruebas claras de infección bacteriana para evitar resistencias y efectos adversos innecesarios en los pacientes.
Así, la OMS refuerza el llamado a que los profesionales de la salud adopten prácticas basadas en evidencia actualizada, asegurando un manejo clínico más seguro y efectivo en la atención de quienes padecen Covid-19.