La noche del jueves en Filadelfia será recordada como una de las más explosivas en la carrera de Kyle Schwarber. El slugger de los Phillies disparó cuatro cuadrangulares en la paliza 19-4 sobre los Atlanta Braves, convirtiéndose en apenas el cuarto jugador en la historia de la franquicia y el vigésimo primero en toda la MLB en alcanzar semejante hazaña.
Schwarber terminó con cuatro imparables en seis turnos y un récord personal de nueve carreras impulsadas, la mayor cifra en la historia de los Phillies. Con este despliegue ofensivo llegó a 49 jonrones en la temporada, líder absoluto de la Liga Nacional, y quedó a solo uno de Cal Raleigh (Seattle) por la cima de las Grandes Ligas. Además, encabeza la MLB con 119 carreras producidas, otro registro personal.
El festival de batazos comenzó temprano. Tras una complicada primera entrada del abridor Aaron Nola (3-7), quien necesitó 37 lanzamientos para contener a Atlanta, Schwarber, J.T. Realmuto y Max Kepler conectaron jonrones consecutivos en la parte baja. Bryce Harper también se unió a la fiesta con un cuadrangular, redondeando una noche en la que los Phillies acumularon 20 imparables.
Por los Braves, Marcell Ozuna se fue de 3-1, mientras que por Philadelphia destacaron Edmundo Sosa (1-1, una anotada y una producida) y Rafael Marchán (1-1).
La actuación de Schwarber no solo revitaliza a unos Phillies en plena lucha por los playoffs, sino que lo coloca en un lugar histórico reservado para los grandes artilleros del béisbol.
