El Banco Nacional de Polonia (NBP) se prepara para un posible nuevo recorte de sus tasas de interés, una medida que sería la tercera en lo que va del año. La expectativa del mercado, respaldada por un sondeo de Reuters, apunta a un descenso de 25 puntos básicos en la tasa de referencia, que actualmente se encuentra en el 5%. La decisión se fundamenta en un panorama macroeconómico que muestra una marcada desaceleración en el crecimiento de la inflación, que en agosto alcanzó su nivel más bajo en más de un año.
La política monetaria del NBP se encuentra en un punto de inflexión. Después de mantener una postura conservadora para combatir la inflación, ahora se ve obligado a relajar las condiciones crediticias para evitar una mayor desaceleración económica. Los recortes de tasas son una señal de que el banco considera que los riesgos inflacionarios están bajo control, a pesar de las preocupaciones sobre un posible aumento del gasto público por parte del gobierno.
Si bien la baja de las tasas es una buena noticia para los deudores y para las empresas que buscan financiamiento, también envía una señal de que la economía polaca se encuentra en un periodo de debilidad. La capacidad del NBP para equilibrar su mandato de controlar la inflación sin frenar el crecimiento será la prueba de fuego de su política monetaria.