Los gobiernos de México y la Unión Europea han dado un paso clave para consolidar su asociación: están afinando los detalles del futuro “Acuerdo Global Modernizado”, una actualización profunda de su antiguo marco comercial. Se espera que este nuevo pacto sea firmado en febrero de 2026 en la Ciudad de México.
Este nuevo acuerdo contempla temas de gran calado, como la eliminación de aranceles para buena parte de los productos agropecuarios, la inclusión de sectores tecnológicamente avanzados y el fortalecimiento de la cooperación en ámbitos como el comercio digital, la inversión y los servicios.
Además, se plantea reconocer indicaciones geográficas de productos mexicanos emblemáticos y facilitar el acceso de pequeñas y medianas empresas a los intercambios transatlánticos, un avance que tanto México como Europa consideran estratégico.
En el contexto internacional actual, este fortalecimiento de la relación bilateral cobra mayor relevancia: con un mundo más competitivo y reconfigurando alianzas, tanto México como el bloque europeo buscan consolidar un socio confiable y abrir nuevas oportunidades de inversión, desarrollo tecnológico y comercio sostenible.







