La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA) han manifestado “profunda preocupación” ante un proyecto aprobado por la Cámara de Diputados de Brasil que obliga a las aerolíneas a incluir el equipaje facturado y de mano dentro del precio base del pasaje. Asimismo, el texto prohíbe cargos adicionales por selección de asiento y contempla la cancelación automática del vuelo de regreso si el pasajero pierde la ida.
Las asociaciones califican la iniciativa como un “retroceso histórico” que podría incrementar los costos operativos del sector, desencadenando pasajes más caros y una menor oferta de rutas, afectando tanto a pasajeros como a economías locales vinculadas al turismo y transporte aéreo.
Desde una mirada crítica, la propuesta presenta dos dimensiones clave:
- En el plano de protección al consumidor, el proyecto responde a la demanda de usuarios que perciben cobros por servicios adicionales como abusivos. Sin embargo, en el contexto de un mercado liberalizado donde las aerolíneas fragmentan precios para mantener tarifas básicas bajas, imponer gratuidad y prohibiciones puede vulnerar la sostenibilidad financiera de las compañías.
- Desde la competitividad sectorial, Brasil ocupa más del 40 % del tráfico aéreo en América Latina. Por tanto, una regulación más rígida allí no sólo impactaría al mercado doméstico, sino que tendría efectos de arrastre regional, elevando costos de transporte, refinamiento de rutas y posiblemente reduciendo inversión extranjera en conectividad hacia el país.
En definitiva, el proyecto de ley brasileño refuerza el dilema entre derechos del usuario, estructura tarifaria moderna y viabilidad económica de las aerolíneas. La resolución que adopten el Senado y las autoridades brasileñas marcará un precedente para la aviación en la región.







