Eugenio Gómez Alatorre
Ahora que Angela Merkel dejará de ser Canciller de Alemania es un buen momento para reflexionar acerca del liderazgo femenino en México y el mundo. En la última década, las mujeres se han abierto camino a puestos de liderazgo importantes. Hoy hay mujeres en los más altos niveles de la toma de decisiones tanto en el mundo corporativo, como en los gobiernos nacionales y los organismos internacionales. Hay avances importantes, aunque aún hay mucho camino por andar. Sin embargo, los consejos de administración todavía son espacios principalmente masculinos en el mundo y en muchos países el avance de la mujer es muy pobre. Este es el caso de nuestro país.
De acuerdo con datos de 2020 Women on Boards y el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD) del IPADE, sólo el 8.7% de quienes ocupan un lugar en un consejo de administración en México son mujeres. En el caso de consejeros independientes, la situación es más grave pues únicamente el 2.2% son mujeres. Todavía hay un 28% de empresas que cotizan en bolsa que no tienen una sola mujer en sus consejos. Otro 42% de estas organizaciones tienen sólo una o dos mujeres en ese órgano de gobierno. Algunos estudios recomiendan tener al menos tres mujeres para cambiar la dinámica de trabajo en los órganos colegiados de toma de decisiones.
En los consejos de administración se toman las decisiones más importantes en las empresas. El buen funcionamiento del gobierno corporativo en las empresas es un tema importante para cualquier economía ya que la competitividad y productividad de las empresas son determinantes para mejorar la calidad de vida de un país. Varios estudios han encontrado una clara relación entre la inclusión de mujeres en los consejos de administración y mejores prácticas en términos de rendición de cuentas, gobierno corporativo y supervisión. Aunque la causalidad es más difícil de establecer, parece ser que el sentido común indica que un consejo formado exclusivamente por hombres no está aprovechando todo el talento y conocimiento que podría aprovechar.
La forma de incluir más mujeres en los consejos no es sencilla. El establecimiento de cuotas ha dejado resultados mixtos y pocas conclusiones claras. Si lo que se quiere es tener al mejor talento, las cuotas no necesariamente son el mejor camino. Por otro lado, la inacción no es una opción. Un camino que ha dado buenos resultados ha sido el de establecer metas y pedir una clara explicación en caso de no se alcancen. Una forma particularmente efectiva consiste en identificar las barreras de acceso a los consejos y atacarlas directamente.
En este sentido, una barrera importante está en que muchos consejeros no conocen a las mujeres que pueden aportar sus habilidades y conocimientos a sus consejos. Es común la queja (o pretexto) de que no hay mujeres preparadas para esa responsabilidad. La realidad es que en México hay muchas mujeres con la capacidad de participar en estos órganos de decisión; sin embargo, es verdad que pueden no tener la suficiente visibilidad.
Por esta razón, es muy bienvenida la iniciativa del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección de formar una Red de Consejeras y Expertas México. Esta red se presentó el pasado 21 de septiembre en colaboración con muchas organizaciones de mujeres, universidades y empresas patrocinadoras. Esta red es una fuente de información para que las empresas que busquen consejeras o expertas en un tema sean capaces de encontrarlas fácilmente. Las mujeres que consideren que tienen la capacidad de unirse a esta red pueden subir su información de forma sencilla y gratuita. La red se encuentra en: https://ipade.service-now.com/red_de_consejeras.
El camino hacia consejos de administración más profesionales y diversos en México todavía está por recorrerse. Sin embargo, iniciativas como la del CIMAD que ofrecen la información necesaria para visibilizar al talento femenino seguramente contribuirán a acelerar el paso para el bien de las empresas mexicanas y de toda la economía nacional.
