27 de julio de 2024 2:42 am
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OPINIÓN

La Liga MX en decadencia (2/3)

Estas dos causas en conjunto, la falta de oportunidades a jóvenes mexicanos y la compra de demasiados jugadores extranjeros con bajo nivel, conllevaron a que paulatinamente la calidad de partidos en la liga vaya en caída...

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Por Sergio Hayen Lizarralde


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Un problema tan complejo no puede ser analizado tan solo observando una arista. En el artículo anterior, abordamos el problema de la eliminación del ascenso y descenso, además de la existencia de la multipropiedad, dos serios problemas que han llevado a que exista nula competitividad y competencia en la Liga Mx.

Para la segunda entrega de esta serie de artículos, analizaremos dos problemáticas que tienen que ver con el desarrollo de la principal materia prima del futbol: los jugadores. Para realizar esto, se abordará el problema desde dos diferentes perspectivas, las cuales son el exceso de extranjeros en la Liga MX y la falta de oportunidades para debutar en primera división.

Los equipos por lo general buscan construir las plantillas más competitivas para poder afrontar partidos del más alto nivel, para poder tener variantes en caso de mal funcionamiento o lesiones de algunos jugadores, y también para poder vender mercancía utilizando a los principales referentes de la institución. Para lograr esto, los equipos tienen dos opciones: recurrir a sus fuerzas básicas o comprar jugadores de otros equipos.

Las fuerzas básicas es el sistema de preparación que tiene un equipo de futbol para ir incorporando poco a poco jugadores jóvenes (usualmente desde los 12 o 13 años) al sistema de juego y la filosofía del club. Funciona como un colegio, en el que los jugadores se van “graduando” y avanzando de categorías conforme su nivel o edad incrementa. Para esto, existen diferentes categorías o “subs”, donde las fuerzas básicas de los equipos se enfrentan entre sí. De esta manera, en la Liga MX existen desde la sub-13 hasta el equipo mayor, el cual es el que estamos acostumbrados a ver jugar todos los fines de semana.

Por lo general los clubes suelen obtener buenos prospectos de sus fuerzas básicas, ya que por más de seis años son observados y monitoreados minuciosamente para que al momento de dar el salto al primer equipo sean capaces de competir por un puesto. Además, es una forma inteligente de invertir a largo plazo, ya que no se tiene que desembolsar grandes cantidades como si se hace en la transferencia de jugadores provenientes de otros equipos, además de que sus sueldos suelen ser más modestos que los de jugadores ya desarrollados o con mucha experiencia.

Sin embargo, observando las actuales plantillas de la Liga MX, podemos deducir la nula confianza que se tiene en las jóvenes promesas mexicanas. Según datos de la Liga MX, de los 18 equipos que conforman a la liga, en total debutaron a 20 canteranos en las primeras cuatro fechas del torneo, es decir, en promedio cinco por jornada. Lo preocupante aquí es solo son nueve los equipos que le han dado oportunidad a los jóvenes de jugar en primera división, y muchas veces no son por cuestiones de confianza.

Los equipos que suelen darle más oportunidades a los jóvenes son el Guadalajara y el Pachuca; el primero debido a la restricción que tiene la institución de jugar con solo jugadores mexicanos, y el segundo debido al gran desarrollo de jóvenes que tiene gracias a su moderno centro de desarrollo. Otros equipos como el Querétaro o los Pumas suelen debutar jóvenes debido al corto presupuesto que poseen las instituciones. Es decir, los equipos solo apuestan por las jóvenes promesas cuando se tienen dificultades para comprar jugadores ya desarrollados o extranjeros.

Hace unos cuantos años, existía la Regla 20/11, la cual exigía alinear jugadores no mayores a los 20 años y 11 meses y que en total cada equipo sumara 1,000 minutos de juego entre todos esos jugadores. Aquellos equipos que no cumplieran con los mil minutos requeridos entre todos los jugadores se les descontarían tres puntos al finalizar el torneo. Ahora, en sustitución a la regla, los jóvenes son enviados a jugar a la división de asenso para que se fogueen hasta los 25 años.

Es aquí donde entra el segundo problema, la inclusión de demasiados extranjeros en la liga. Los equipos les dan menos oportunidades a los jóvenes mexicanos porque prefieren importar jugadores sudamericanos en exceso. Y no digo que la inclusión de jugadores proveniente de otras ligas sea algo malo, es más, las mejores ligas del mundo están repletas de jugadores de diferentes nacionalidades, como la inglesa o la española.

El problema recae en la calidad de extranjeros que llegan a jugar a la liga. La Liga MX actualmente cuenta con 173 extranjeros distribuidos en los 17 equipos (recordemos que Guadalajara solo juega con mexicanos), es decir, aproximadamente 10 jugadores extranjeros por equipo. Dentro de estos extranjeros hay varios de renombre como Diego Valdés (de Chile), André Pierre Gignac (de Francia), Sergio Canales (de España) o Maximiliano Araujo (de Uruguay). Sin embargo, son pocos los extranjeros que elevan la calidad de la Liga.

Además, el problema se agrava cuando estos jugadores llegan tras desembolsar grandes cantidades de dinero por ellos, y con sueldos muy por encima de los que perciben los jugadores mexicanos. Los equipos al realizar tales inversiones y no ver resultados, prefieren seguir dándole minutos a estos extranjeros, en lugar de darle oportunidades a jóvenes mexicanos. Para agravar el problema, la fama de que los jugadores sudamericanos son garantía solo por la nacionalidad que poseen, hace que los equipos decidan invertir en ellos, aunque los números en sus ligas de origen sean muy tristes.

Como consecuencia, tenemos una liga con alineaciones de equipos con un promedio de 7 jugadores extranjeros, y los restantes jugadores mexicanos suelen ser ya veteranos o con trayectoria en la liga. A corto plazo eso no parece ser un problema, pero a mediano y largo plazo esto ocasionará que el jugador mexicano escasee en el mercado, ya sea por su calidad (al no tener fogueo en partidos importantes) o su cantidad (debido a la baja tasa de debuts que se da).

Siguiendo la idea anterior, la escasez de jugadores mexicanos ha ocasionado que el valor de estos incremente con respecto a otras épocas (es normal, ley de oferta y demanda). El problema es cuando equipos europeos deciden visorear a un jugador mexicano en la Liga MX, ya que al final terminar por pensársela dos veces al momento de comprarlos, debido a que por lo que deben de desembolsar, pueden comprar a dos jugadores brasileños o argentinos que históricamente suelen ser más eficientes a largo plazo (son mas baratos, tienen sueldos más bajos y tienen mayor potencial).

Estas dos causas en conjunto, la falta de oportunidades a jóvenes mexicanos y la compra de demasiados jugadores extranjeros con bajo nivel, conllevaron a que paulatinamente la calidad de partidos en la liga vaya en caída, y que mucha gente haya perdido no solo interés en la Liga, sino también en la selección mexicana. Una consecuencia muy reciente del bajo nivel de los equipos mexicanos fue la Leagues Cup, torneo internacional que se disputo contra equipos de Estados Unidos, en donde muy pocos equipos mexicanos dieron la cara por el futbol mexicano (solo 2 equipos llegaron a los mejores 8 y solo 5 entre los mejores 16).

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