La importancia de la educación financiera en México ha cobrado relevancia, especialmente tras las lecciones aprendidas durante la pandemia de COVID-19. La pandemia dejó al descubierto el bajo nivel de ahorros y planeación financiera en el país, llevando a un reconocimiento generalizado sobre la necesidad de mejorar las habilidades financieras de la población. La educación financiera permite a las personas gestionar mejor sus ingresos, realizar inversiones informadas y prepararse para eventualidades económicas.
Desde 2020, la cantidad de contratos de inversión en plataformas como Cetesdirecto ha crecido un 264%, reflejando un creciente interés por hacer crecer el dinero de manera informada. Además, el número de clientes en fondos de inversión ha mostrado una tendencia importante de crecimiento, pasando de casi 3 millones a más de 6 millones en tres años. Esto indica una mayor participación de la población en el sistema financiero y una búsqueda por opciones de ahorro e inversión más sofisticadas.
La pandemia resaltó la importancia de contar con un fondo de emergencia, la protección financiera a través de seguros y el valor de hacer crecer el dinero mediante inversiones. La realización de cursos, diplomados y la utilización de herramientas digitales se han promovido para mejorar la educación financiera en México, ayudando a las personas a desarrollar habilidades que les permitan tomar decisiones financieras más informadas y responsables. Con la mejora en la educación financiera, se espera no solo elevar el bienestar económico de los individuos sino también contribuir al crecimiento económico general del país.
Con información de El Economista | Nota original
