Durante su intervención en el mitín fuera del Palacio Legislativo de San Lázaro, Bertha Gómez reafirmó que la disciplina presupuestal será la principal herramienta para el manejo de los recursos en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2025. La subsecretaria de Egresos explicó que el gasto total propuesto de 9.3 billones de pesos se destinará en su mayor parte a cubrir las obligaciones fiscales, incluyendo el costo financiero de la deuda y las participaciones a las entidades federativas.
Gómez destacó que uno de los principales objetivos del PPEF es alcanzar un equilibrio entre los ingresos y los gastos, y reducir el déficit presupuestal. La funcionaria recordó que la presidenta Claudia Sheinbaum dio instrucciones claras para asegurar que el gasto se ajuste a lo aprobado en la Ley de Ingresos para 2025.
A pesar de las proyecciones de algunos analistas que estiman un crecimiento económico inferior al 2.3% previsto, Gómez defendió que el presupuesto busca una asignación estratégica de recursos para mejorar las condiciones de vida de las poblaciones más vulnerables y consolidar a México como un referente en justicia social y prosperidad compartida.
El gasto, según la subsecretaria, crecerá un 2.6% en términos nominales, pero en términos reales, debido a la inflación, se espera una reducción del 1.9%. Además, subrayó que se implementarán medidas estructurales, como la centralización de todas las unidades administrativas bajo la Subsecretaría de Egresos, la eliminación de aumentos salariales para funcionarios de “estructura” y una reestructuración del gobierno, con el fin de optimizar los recursos asignados.
Para el año 2025, se proyecta que 6.5 billones de pesos se destinen al gasto programable, mientras que el resto será para el gasto no programable. Con estas medidas, el gobierno espera reducir el déficit público del 5.9% al 3.9% para el próximo año.
