Pendientes en inversiones y energía
Los principales retos en la negociación están en el ámbito energético y las inversiones. Gutiérrez subrayó la necesidad de ajustar las normativas europeas a la legislación mexicana, respetando sus particularidades:
«Ellos tienen una norma diferente a la nuestra, y simplemente es adecuarse a nuestra normatividad».
En cuanto a inversiones, se busca estandarizar reglas para fomentar flujos bilaterales que beneficien a ambos bloques.
Avances y contexto histórico
El TLCUEM 2.0 es un acuerdo de última generación que integra áreas como energía y materias primas, buenas prácticas regulatorias, transparencia y cooperación política.
- Los negociadores lograron avances significativos en 2017 y 2018, alcanzando acuerdos preliminares en elementos políticos y comerciales.
- Las negociaciones técnicas concluyeron entre 2019 y 2020, pero la pandemia y el gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador pausaron los avances.
A pesar de este retraso, el subsecretario Gutiérrez expresó optimismo, indicando que en 2025 se podrían compartir noticias positivas sobre el tratado.
Importancia estratégica del TLCUEM 2.0
La modernización de este tratado incrementará las oportunidades comerciales y de inversión entre México y las 27 naciones de la Unión Europea, potenciando su capacidad de acción conjunta frente a los desafíos globales.
De enero a septiembre de 2024, las exportaciones mexicanas hacia la UE alcanzaron 18,402 millones de dólares, aunque mostraron una leve disminución del 0.8% interanual, según la Secretaría de Economía.
La firma del TLCUEM 2.0 marcaría un hito en las relaciones comerciales entre ambos bloques, consolidando un acuerdo moderno y dinámico que responde a las demandas del mercado global actual.