El lunes, Israel liberó al primer grupo de 90 presos palestinos, compuesto mayoritariamente por mujeres y niños, como parte del acuerdo de alto el fuego alcanzado en la Franja de Gaza. Esta acción fue precedida por la entrega de tres rehenes israelíes, quienes ahora se encuentran en un hospital de Tel Aviv.
Los prisioneros fueron reunidos en la cárcel de Ofer, donde se verificó su identidad y se realizaron controles médicos antes de su liberación. La Cruz Roja facilitó el traslado de 78 de ellos a Beitunia, en Cisjordania, y de 12 más a Jerusalén Este.
En Cisjordania, la liberación fue celebrada con cánticos y banderas de Hamás. Entre los liberados se encuentran 69 mujeres, nueve menores y activistas reconocidos, como Jalida Jarrar. Esta acción es la primera fase de un acuerdo más amplio que contempla la excarcelación de cerca de 2,000 prisioneros palestinos en los próximos 42 días.
A cambio, Hamás entregará a un total de 33 rehenes israelíes, lo que marca un importante gesto en las negociaciones para reducir la tensión en la región.