Estados Unidos ha comenzado una operación de deportación masiva de migrantes. Dos vuelos militares llegaron a Guatemala, transportando a decenas de guatemaltecos retornados, mientras ambos gobiernos mantienen reservas sobre detalles.
Este viernes, Guatemala recibió dos aviones militares de Estados Unidos que transportaban a decenas de ciudadanos guatemaltecos deportados, como parte de una operación masiva iniciada por el gobierno del presidente Donald Trump. Las autoridades locales informaron que un primer vuelo, con 79 personas —31 mujeres y 48 hombres—, aterrizó a la medianoche, mientras que un segundo vuelo llegó por la mañana, aunque no se precisó el número exacto de pasajeros.
El Pentágono confirmó que los aviones del Departamento de Defensa realizaron estos vuelos de repatriación, en los que se cumplen las órdenes migratorias establecidas tras la toma de posesión de Trump. Sin embargo, ni Estados Unidos ni Guatemala han aclarado si entre los deportados están algunos de los 538 migrantes detenidos recientemente, según el anuncio previo de la Casa Blanca.
Los deportados fueron trasladados al Centro de Recepción de Retornados, situado junto a la base aérea en Ciudad de Guatemala, donde se esperó la visita de la vicepresidenta Karin Herrera. Este operativo forma parte de las políticas migratorias que Trump había prometido durante su campaña, destacando su intención de implementar la mayor operación de deportaciones en la historia del país.
La situación preocupa a Centroamérica, ya que las remesas enviadas por los migrantes constituyen una parte vital de las economías de la región, representando hasta un 25% del PIB en países como Guatemala, El Salvador y Honduras. Ante esta crisis, el gobierno guatemalteco ha diseñado un plan de recepción que incluye albergues y programas de reinserción laboral.
En tanto, el secretario de Estado, Marco Rubio, visitará la región la próxima semana para abordar temas migratorios y reforzar la postura estadounidense en materia de seguridad fronteriza.
