El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró este viernes su intención de aplicar aranceles a productos japoneses en caso de que el déficit comercial entre ambos países no se reduzca. La declaración se dio durante una reunión en la Casa Blanca con el primer ministro de Japón, Shigeru Ishiba. Trump señaló que busca una relación comercial «justa» y enfatizó la necesidad de implementar medidas para equilibrar la balanza económica entre ambas naciones.
Previo a este encuentro, Trump había adelantado su plan de imponer aranceles recíprocos a varios países, argumentando que esta acción ayudaría a reducir el déficit presupuestario de Estados Unidos. Aunque no se especificaron los países que podrían verse afectados, Tokio teme verse involucrado en una disputa comercial similar a las que Washington ha mantenido con Canadá, México, China y la Unión Europea.
Según un informe del Congreso estadounidense, en 2023 el déficit comercial de Estados Unidos con Japón alcanzó los 72,000 millones de dólares. Para contrarrestar las amenazas de nuevos aranceles, se especula que Ishiba podría proponer un aumento en la compra de gas natural estadounidense, lo que beneficiaría a ambas economías y reforzaría la seguridad energética de Japón.
El comercio no fue el único tema abordado en la reunión. La agenda también incluyó temas de seguridad internacional, como las crecientes tensiones en la región Asia-Pacífico. Japón, que alberga a miles de tropas estadounidenses, está preocupado por la expansión militar de China y la amenaza de Corea del Norte. Aunque hasta ahora Trump no ha aplicado una política tan estricta contra China como su predecesor Joe Biden, persisten las dudas sobre el futuro de las relaciones diplomáticas en la región.
