El sector industrial mexicano cerró el 2024 con una caída generalizada, marcando su desempeño más débil desde el 2020. Durante diciembre, la actividad se contrajo un 1.4% en comparación con el mes anterior, siendo la mayor baja mensual desde noviembre de 2023, cuando el descenso fue del 2.3%, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
La disminución se dio en todos los sectores industriales: la construcción cayó un 2.1%, los servicios de electricidad, gas y agua un 1.9%, la manufactura un 1.2% y la minería un 1%. Esta tendencia a la baja ya había sido evidente en meses anteriores, pues diciembre marcó el cuarto mes consecutivo de caída interanual, con una reducción del 2.4%.
Dentro del sector constructivo, la situación fue particularmente crítica debido a la caída en las obras de ingeniería civil, que sufrieron una drástica reducción del 33.7% en diciembre. Este descenso se debe al menor volumen de inversión en proyectos de infraestructura, tras un 2023 impulsado por grandes obras como el Tren Maya.
En tanto, la manufactura registró retrocesos en 14 de sus 21 ramas, destacando las caídas en la fabricación de equipo de transporte (-6.4%) y muebles (-4.1%).
A pesar del escenario negativo en la segunda mitad del año, la industria logró cerrar con un ligero crecimiento del 0.2% anual, impulsado por un mejor desempeño en los primeros meses. Sin embargo, este resultado representa una fuerte desaceleración en comparación con el crecimiento del 3.4% registrado en 2023.