El Banco de México (Banxico) ha manifestado confianza en la fortaleza económica del país para hacer frente a posibles desafíos derivados de la administración de Donald Trump en Estados Unidos. La Junta de Gobierno del banco central destacó que México cuenta con una base financiera sólida, un sistema bancario bien capitalizado y un régimen cambiario flexible que permitirían mitigar los impactos externos.
Los riesgos identificados incluyen la posible imposición de aranceles a las exportaciones mexicanas y una política migratoria y comercial más estricta desde Estados Unidos. La mayoría de los miembros de Banxico considera que estos factores podrían generar presiones inflacionarias tanto en México como en EE.UU. Sin embargo, enfatizaron que la estabilidad de las finanzas públicas y la política monetaria pueden contribuir a amortiguar estos efectos adversos.
Según la minuta de la reunión del 6 de febrero, un integrante de la Junta de Gobierno resaltó que México sobresale entre las economías emergentes debido a su robustez macroeconómica. Además, subrayó que el sistema bancario del país cuenta con niveles adecuados de liquidez y capitalización, factores clave para garantizar la estabilidad financiera.
El pasado 6 de febrero, Banxico redujo en 50 puntos base la tasa de interés, situándola en 9.50%, en respuesta a la disminución de la inflación general y las condiciones del entorno financiero global. La última vez que se realizó un ajuste de esta magnitud fue en agosto de 2020, cuando la tasa se redujo a 4.50%. Según la minuta, algunos miembros del banco central consideran que es momento de evaluar ajustes adicionales en la política monetaria para consolidar la estabilidad económica y controlar la inflación en el mediano plazo.
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