Coca-Cola presentó sus resultados financieros del primer trimestre de 2025 con cifras mixtas: superó las estimaciones de ganancias, pero no alcanzó las proyecciones de ingresos. Tras el anuncio, sus acciones subieron un 1.1% en la bolsa de Nueva York.
La empresa reportó una ganancia ajustada por acción de $0.73, apenas un centavo por encima del consenso de los analistas, que esperaban $0.72. En contraste, los ingresos alcanzaron los $11.1 mil millones, quedando ligeramente por debajo de los $11.2 mil millones proyectados.
El crecimiento orgánico de los ingresos fue del 6% interanual, impulsado principalmente por un aumento del 5% en precios y mezcla de productos, junto con un 1% de incremento en la venta de concentrados. El volumen de cajas unitarias aumentó un 2%, con India, China y Brasil como principales motores del crecimiento.
El presidente y CEO de la compañía, James Quincey, destacó la capacidad de Coca-Cola para adaptarse a entornos complejos: “Nuestro desempeño este trimestre demuestra una vez más la efectividad de nuestra estrategia para todo clima”. También reconoció presiones en mercados desarrollados, aunque subrayó la fortaleza de su presencia global.
En cuanto a la rentabilidad, el margen operativo de la compañía se expandió significativamente hasta el 32.9%, desde el 18.9% del mismo trimestre de 2024. El margen operativo comparable mejoró al 33.8%, gracias a un crecimiento orgánico sólido, gestión eficiente de costos y mejor timing en inversiones de marketing.
Para el cierre de 2025, Coca-Cola mantiene su pronóstico de crecimiento orgánico de ingresos entre 5% y 6%, y ajustó su expectativa de crecimiento en ganancias por acción comparable al rango de 2% a 3%, considerando un impacto cambiario negativo de hasta 6%.