El Senado de Estados Unidos decidió extender hasta este lunes la votación del proyecto fiscal impulsado por el expresidente Donald Trump, tras más de cinco horas de discusión. Esta iniciativa, calificada por Trump como una “gran y hermosa ley”, ha generado controversia al prever un aumento de 2.4 billones de dólares en el déficit federal durante la próxima década, de acuerdo con cálculos de la Oficina Presupuestaria del Congreso.
La sesión, conocida como “vote-a-rama”, permitirá a los senadores presentar enmiendas ilimitadas antes de emitir su voto final. Este maratón legislativo comenzará a las 9:00 de la mañana (hora del Este), según confirmó la oficina de John Barrasso, líder republicano en la Cámara Alta.
Aunque los republicanos tienen mayoría en el Senado, dos senadores de su propio partido—Thom Tillis (Carolina del Norte) y Rand Paul (Kentucky)—se manifestaron en contra del proyecto. Ambos coincidieron con los demócratas en que esta reforma pone en riesgo el seguro médico de casi 12 millones de estadounidenses para 2034. Tillis fue especialmente crítico al señalar que la iniciativa contradice las promesas de campaña de Trump sobre proteger los programas sociales.
El propio Trump, por su parte, recurrió a su red social Truth Social para presionar a sus aliados republicanos, recordándoles que aún deben buscar la reelección. Aseguró que los efectos negativos serán compensados «por diez» gracias al crecimiento económico que generará el plan. Sin embargo, las divisiones dentro del Partido Republicano y el impacto proyectado sobre la salud pública mantienen el futuro del paquete fiscal en suspenso.
