El senador estadounidense Marco Rubio se reunirá este viernes con Wang Yi, jefe diplomático de China, en el marco de la cumbre de ministros de Relaciones Exteriores de la ASEAN, que se celebra en Kuala Lumpur, Malasia. Este encuentro se produce en un escenario de fuertes fricciones entre ambas potencias, derivadas de disputas comerciales, tecnológicas, la crisis del fentanilo y el conflicto en torno a Taiwán.
La reunión forma parte de los esfuerzos por mantener abiertas las líneas de comunicación entre Washington y Pekín, especialmente luego del regreso de Donald Trump a la presidencia en enero, quien ha endurecido nuevamente su política económica hacia China. Las nuevas tarifas del 145% impuestas por EE. UU. a productos chinos han sido respondidas con aranceles del 125% por parte del gobierno asiático.
Ambas naciones acordaron en mayo una tregua provisional durante una reunión en Ginebra, con el objetivo de suavizar el impacto de estos gravámenes sobre sus respectivas economías. No obstante, las tensiones no han desaparecido, y los líderes diplomáticos intentarán, durante este encuentro en ASEAN, avanzar hacia un entendimiento más sólido.
La cumbre, además de contar con la presencia de China y Estados Unidos, reúne a representantes de Japón, Corea del Sur y Australia, quienes también observan con atención los movimientos de estas dos superpotencias. La cita podría marcar un nuevo rumbo en las relaciones internacionales del Pacífico, en un momento particularmente delicado para la estabilidad regional y global.