Este martes, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) entregó el Premio Nacional de Artes y Literatura 2024 a seis figuras clave en el ámbito de las artes, el pensamiento y la cultura mexicana. La ceremonia se llevó a cabo en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, donde se destacó la relevancia de su trabajo para la memoria histórica, la identidad nacional y el patrimonio vivo del país.
Las personas galardonadas fueron: la antropóloga María Teresa Rojas Rabiela; el arqueólogo y director del Proyecto Templo Mayor, Leonardo López Luján; el investigador de culturas originarias del norte, Antolín Vázquez Valenzuela; el escritor y académico Vicente Quirarte; el compositor y maestro Héctor Tamez Domínguez; y la cocinera tradicional purépecha, Juana Bravo Lázaro. Cada uno recibió el reconocimiento por su destacada trayectoria y aportaciones en su disciplina.
Durante su intervención, María Teresa Rojas hizo énfasis en el deterioro del paisaje chinampero de Xochimilco y Tláhuac. Subrayó que estas regiones, declaradas Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, requieren una política pública más comprometida para proteger su riqueza agrícola, ecológica y cultural, proponiendo un plan que vaya más allá del espectáculo turístico.
El resto de premiados también compartieron emotivos mensajes. López Luján agradeció al INAH por ser su casa profesional durante más de cuatro décadas. Héctor Tamez dedicó su premio a los músicos tradicionales que inspiran su obra. Vicente Quirarte, mediante una carta leída por su hija, resaltó la importancia del reconocimiento a las letras. Antolín Vázquez ofreció el galardón a su comunidad yoreme, mientras que Juana Bravo celebró la oportunidad de difundir la cultura purépecha a nivel internacional.
La directora del INBAL, Alejandra de la Paz, cerró el acto reconociendo la influencia transformadora de los premiados en sus áreas, destacando su papel como pilares de una cultura mexicana diversa, viva y en constante evolución.