En un cierre digno de película, Trevor Lawrence lideró a los Jaguars de Jacksonville a una victoria 31-28 sobre los Chiefs de Kansas City, gracias a una jugada improbable que selló el triunfo con menos de medio minuto en el reloj.
Con 23 segundos restantes, el mariscal de campo tropezó tras recibir el balón, cayó al suelo y, cuando parecía que la ofensiva se derrumbaba, logró levantarse, esquivar defensores y anotar en carrera de una yarda. La jugada coronó una noche en la que Lawrence sumó tres touchdowns totales —dos por tierra y uno por aire— y dio a Jacksonville su cuarta victoria del año, rompiendo una racha de ocho derrotas consecutivas ante Kansas City.
El quarterback de los Chiefs, Patrick Mahomes, había puesto a su equipo en ventaja 28-24 con menos de dos minutos por jugar, pero no pudo revertir el marcador en su última posesión. Su pase final fue incompleto, desatando la euforia en el TIAA Bank Field.
El apoyador Devin Lloyd también fue clave para los Jaguars con una intercepción devuelta 99 yardas para touchdown, la más larga por un linebacker en temporada regular en la historia de la NFL.
“Es una gran victoria”, dijo Lawrence tras el juego, coincidiendo con su cumpleaños número 26. “Ellos siempre encuentran la manera de mantenerse en el partido, pero hoy fuimos nosotros quienes lo cerramos”.
Los Jaguars (4-1) igualan así su total de victorias del año pasado, mientras que los Chiefs (2-3) suman su tercera derrota de la temporada, a pesar de los dos touchdowns de Mahomes y las dos anotaciones por tierra de Kareem Hunt.