Bitácora del Cierre | 2/12/25
El día cerró con un tono claramente dubitativo en los mercados globales. Europa ofreció la primera señal de respiro: la inflación de la zona euro volvió a moderarse tanto en su lectura mensual como anual, reforzando la narrativa de un BCE que podría mantener una postura más cómoda hacia el inicio de 2026. Aun así, el desempleo permaneció estable en 6.4%, lo que pone un freno a cualquier expectativa de recortes agresivos.
En Reino Unido, los datos de Nationwide mostraron que el mercado inmobiliario sigue vivo, pero lejos de un impulso sólido; mientras tanto, el Banco de Inglaterra publicó actas prudentes, reafirmando que el ciclo de política restrictiva está prácticamente maduro pero no del todo cerrado. El euro y la libra navegaron sin convicción durante la sesión.
Sudáfrica sorprendió: su PIB anual repuntó con más fuerza de la esperada, pero el dato trimestral quedó corto, reflejando una recuperación desigual. Brasil, por su parte, decepcionó con una caída anual en su actividad industrial, una señal delicada para Latinoamérica en un momento de fragilidad manufacturera global.
En Estados Unidos, el indicador IBD/TIPP dio un giro muy positivo al subir hasta 47.9 puntos, acercándose nuevamente al umbral de optimismo. Sin embargo, la atención del mercado se concentró en el fuerte ajuste en las posiciones especulativas de la CFTC: el oro y el petróleo registraron un repliegue notable en posiciones netas largas, mostrando un apetito menor por riesgo en commodities. El movimiento más ruidoso fue la caída en posiciones del S&P 500, que refuerza la idea de cautela previa a los datos laborales del viernes.
La sesión cerró con un ánimo mezclado: macro suave en Europa, señales divididas en emergentes y un mercado estadounidense reposicionándose de cara a eventos clave. No hubo catalizadores definitivos, pero sí un mensaje claro: los inversores están afinando posiciones y cualquier sorpresa en inflación o empleo podría mover el tablero con fuerza.
El día de mañana les traeremos la apertura con los primeros datos y la reacción de los mercados globales.
